El fundador del judo, Jigoro Kano, pretendía que a través de este arte marcial los deportistas desarrollaran su cuerpo y su ser, por lo que es muy importante la técnica, pero también el respeto, el autocontrol y la no violencia.
Se puede empezar a practicar el judo a partir de los 4 o 5 años, aunque al principio lo importante es que a través de juegos se disfrute de este deporte. El judo ayuda a los niños a relacionarse con los demás y favorece un crecimiento saludable.
Está especialmente indicado para niños tímidos o con problemas de socialización, baja autoestima e hiperactivos, ya que el autocontrol es un elemento fundamental.
El judo ofrece momentos felices a la vez que enseña tolerancia, adaptación a los demás, resistencia al dolor y a los desengaños, le enseña cómo soportar la derrota, así como a ganar. A través del
juego con compañeros el judoka puede apreciar y comparar sus habilidades y su autoimagen. Especialmente en el adolescente, el deporte favorece la integración en grupo y mejora la autoestima del
individuo. Además, mejora la condición física general y permite una mayor tolerancia al ejercicio, facilitando el correcto desarrollo tanto físico como psíquico del individuo.
Al ser un deporte que desarrolla todos los músculos del cuerpo por igual, favorece un crecimiento saludable. Los ejercicios que se plantean para los niños (correr, saltar, gatear…) hacen que desarrollen su psicomotricidad y utilicen toda su energía a la vez que ganan confianza en sí mismos. Poco a poco los niños van aprendiendo a dominar su cuerpo a través de la actividad física.
La flexibilidad, el equilibrio y la velocidad son otros de los elementos claves que desarrolla la práctica del judo. Pero además de desarrollo físico, éste deporte requiere concentración: han de aprender a tomar decisiones rápidas, y ejecutarlas con decisión.
El Judo es un deporte que también se caracteriza por ser muy apto para los niños asmáticos como explica en el artículo ASMA Y DEPORTE el Dr. Juan J. Morell Bernabé. Entre sus ventajas de este deporte con respecto al asma, es que se practica en espacios cerrados y que desarrolla toda su acción en un corto período de tiempo.
La UNESCO declaró el Judo como el mejor deporte inicial formativo para niños ya que desarrolla una educación física integral y potencia las habilidades psicomotrices (ubicación espacial, perspectiva, lateralidad, lanzar, tirar, empujar, arrastrarse) así como de relación con las demás personas, haciendo uso del juego y la lucha como elemento integrador-dinamizador. Además, el COI lo considera el deporte más completo por promover valores como la amistad, la participación, el respeto y la superación personal.